
Barcelona y alrededores está soportando estos días el azote de las lluvias torrenciales y tormentas eléctricas... Buena ocasión para practicar uno de mis deportes favoritos: Cazar rayos. No es que sea un experto. Recuerdo mis primeros intentos con la Yashica de mi padre: ese día la caza se saldó con un cristal roto y la cámara bastante mojada. Pero de rayos, nada.
Pasaron unos años sin pena ni gloria en cuanto a los rayos, claro. Y el año pasado, con la D70 salió la que, hasta ahora ha sido mi mejor sesión de rayos, en el mismo sitio que unos años antes me había cargado la ventana del comedor. Estas fotos corresponden a ese día.
La foto que inicia esta entrada es la que acabo de sacar, lógicamente la tormenta estaba más lejos y la foto no es tan espectacular... Pero después de varias semanas sin pena ni gloria, me apetecía que saliera alguna decente!
PD: No lo intenteis sin las medidas de seguridad adecuadas, los rayos MATAN!



